Estamos en construcción, disculpe usted las molestias... o no.

 

¿De que va VadeMACum?

Allá por mil novecientos ochenta y cinco conocí un primer Mac, un Plus creo recordar.

Yo trabajaba en un periódico local muy humilde, que, locos ellos, pensaron en comprar un ordenador, — hasta ese momento yo lo montaba a mano a base de artículos escritos en una Olivetti eléctrica —, y el candidato fue un Mac, pero dado su precio acabamos maquetando con Ventura Publisher en un Inves turbo 8 Mhz.

Hasta el ochenta y nueve no volví a tocar un Mac y mi primera máquina propia fue un LC II en el noventa y dos.

Desde entonces, como cualquier otra obsesión, lo leí, escuche, pregunte y aprendí todo o casi todo lo que pude sobre aquellos bichos grises, creados pensando en quién los utilizaría y no en quién los vendería.

Hoy, aquella entrañable manzana de colores ha cambiado, y con el arco iris también se ha descolorido el ínteres por el usuario. Apple crea máquinas maravillosas, sí, pero ajenas, más cercanas a los “victim tech” y los ingenieros que al currito y el artista.

Y todo el mundo parece muy contento de como se hacen las cosas en Cupertino.

¿Donde esta la crítica? antes tan comun, pues no lo se, pero hasta que Apple me pague como evangelista, yo diré aquí lo que pienso, y probablemente escueza más de un Makero por poco pertinente, pero creo que la crítica es saludable y solo molestan las verdades incómodas.

Así que desde mi larga experiencia de usuario seré impertinente.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

¿Donde están aquellos profesionales?

El otro día me sorprendía la opinión de alguien, decía que el IMac de veintisiete pulgadas no merecía la atención de los profesionales porque su gran pantalla, con ser buena, no alcanzaba la calidad suficiente para cubrir el estándar de color de Adobe que un profesional exige.


Ya, ¿y?


Los IMac no son herramientas profesionales, ya lo sabemos, pero es muy cierto que en la gama Apple de los últimos años no hay herramientas profesionales para presupuestos bajos, por lo que estos IMac, sobre todo los ful equipe, han poblado muchos estudios y empresas.


Pero a fin de cuentas, son solo la herramienta.


No se cuantos años tiene de profesión está persona, y no importar realmente. Pero yo si voy a contar los que yo llevo de mili, que tampoco importa en realidad, pero viene a cuento del argumento que quiero desarrollar.

El primer Mac que vi fue en el ochenta y cinco, probablemente un fat Mac. Por aquel entonces yo era un joven fotero que lidiaba sus primeras armas en un periódico local, queríamos informatizarnos y tras horrorizarnos por el precio del Mac, compramos un Inves.

Allá por el ochenta y nueve ya usaba Mac en maquetación y diseño; Mac II, IIcx, IIci… Y desde entonces han pasado por mis manos un par de centenares de Mac.


Pero a lo que voy es que en aquellos tiempos heroicos, los profesionales teníamos que trabajar de oído. Eran muy pocos los que podían presumir de usar un monitor en color, recordemos que los Cabezones tenían nueve pulgadas en doscientos cincuenta y seis grises y era el caballo de batalla de muchas imprentas pequeñas.

Incluso los ricos que tiraban de Mac II con un Alta Resolución, solo disponían de 480 por 640 pixel a cuatro mil colores.

Hasta el cariiiiiiiiiisimo Doble pagina solo alcanzaba los 1.152 por 870 pixeles en grises.


¿Como puñetas nos apañábamos con el color?


Bueno, era fácil. A base de atlas de colores y pantonarios. A base de conocer el oficio y saber como reproduciría el color una imprenta. A base de educar el ojo y saber que saldría con solo ver una separación.


A base de ferros y cromalines… si el cliente los pagaba, claro.


Se maquetaba — cierto es que se usaba menos el color — a ojo, se elegían los colores con muestras y se rezaba para que en la imprenta hicieran bien su trabajo. Que solían hacerlo.

Aunque ya existía potochof, lo del tratamiento de imágenes por ordenador se limitaba a escanearlas con un cilíndrico para sacar los fotolitos.

El retoque era a mano y en laboratorio.


Y que conste que los que aprendimos el oficio entonces somos mucho menos hábiles que nuestros maestros.

El mío en concreto era capaz de corregir un fotolito con solo verlo en la mesa de luz… ¡y lo clavaba, oiga!


¿Que les pasa ahora a los profesionales?, ¿no son capaces de trabajar con muestras?, ¿si no lo ven con toda exactitud en pantalla no saben que va a salir?


Joder, ¿y como lo sabíamos nosotros?


Hoy, cualquier pantalla, por cutrilla que sea, aunque la saquemos de un súper, es infinitamente mas fiable y precisa que cualquier monitor, no ya de los ochenta, sino de los noventa.

Sí, ya, claro. Quién no quiere trabajar con un treinta pulgadas bien calibrado. Es mucho más fácil, que coño.

Sobretodo con las imágenes.

Pero si como suele ocurrir, el noventa por ciento de la gente tiene que trabajar con pantallas mucho más baratas, pues bueno, se hace, ¿no?


Pues parece que no. Parece que si no se puede usar una súper pantalla Barco o similar, calibrada al nanómetro y con una resolución de tres mil pixel un profesional no puede trabajar…


Bueno, viendo el noventa por ciento de lo que se publica no me lo explico, será que tienen pantallas muy malas…


Joder, será que en aquel entonces no éramos profesionales… o que como decía mi maestro; lo importante no es la herramienta, sino lo que hagas con ella.


Los Mac siempre fueron LA HERRAMIENTA — ahora menos — pero nos daba igual si usábamos un IIfx o un fat, se sacaba el máximo rendimiento a al herramienta y punto.


Mucho morro fino hay hoy en día, me parece.


Yo, aunque jubilado, retirado, estoy esperando a que se dignen a mandarme mi veintisiete. Y soy muy consciente de sus limitaciones, sobretodo la horrible pantalla brillante que San Wozniak confunda a sus creadores, pero la verdad es que sus ventajas me convencen más que sus defectos.

Cuando llegue disfrutare de una resolución de dos mil quinientos por mil seiscientos pixel a millones de colores en SRGB, como en el treinta, pero claro, con el defecto de que los pixeles son más pequeños y no alcanzan el Adobe.

Apple introdujo la norma de que un documento al cien por ciento mostraba el tamaño real en pantalla, pero claro, las multiresolución rompieron esta regla, ahora hay que elegir “ampliaciones” extrañas para ver el documento real.

Pero eso llevo años haciéndolo, así que no me molesta y podré ver doble página real sin problemas.

Cuando llegue tendré un core duo a tres gigas. Sí, ya se que no es mucho, pero si necesitara más potencia sería porque podría pagar un Pro con un Treinta.

Pero la diferencia de precio es de alrededor de siete u ocho mil euros así sabré apañármelas con un equipo completo a precio del Treinta.

Así que tendré más potencia que ahora y más pantalla que ahora.

Cuando llegue no tendré un color real… ¿Adobe?, pero salvo desde que uso el Veinte de Apple, toda la vida he calibrado a ojo el color y… modestia a parte… consigo mejor color a ojo que otros con barco calibrado, así que, como es cosa de saber que hacer con la herramienta, pues no me preocupa.

Cuando llegue podré usar la tarjeta de 512 Mb. conectando el Veinte que ahora uso — ese si da color real — en modo escritorio extendido, con lo que seguiré trabajando con dos pantallas y si el color de la Veintisiete no me convence, podré calibrarlo con el Veinte.

Podré trabajar con mucha comodidad y espacio que como decía el anuncio, el espacio si es lujo.

Cuando llegue disfrutare de la posibilidad de tener un centro multimedia en casa. Un veintisiete pulgadas es un buen televisor para una casa pequeña, puedo conectarle un gato y usarlo como televisión con dividi y si le conecto un adaptador vía FW o USB puedo usar otros periféricos como el viejo pero insustituible vídeo.

Incluso puedo usar el disco gordo para tener una librería de películas, ya que para usos generales, mi actual red con servidor de archivos en el G4 por vía FW es más que suficiente para los trabajos.

Así que tendré herramienta y ocio, eso me recuerda la época dorada del Mac.


Vamos que cuando llegue. Si llega que mira que son pesados. Tendré un buen sustituto que cubra mis necesidades. 

Y aunque saliera del retiro y tuviera que hacer un trabajo importante, me importaría muy poco que la pantalla no alcance los más estrictos cánones de color de Adobe o no sea la máquina más rápida del mercado, porque seguiré siendo perfectamente capaz de hacer un trabajo, más que satisfactorio, a la vieja usanza.

Con pantonario y atlas de color.


Vamos, que si bien últimamente podemos quejarnos con mucha razón y criticar más que justificadamente las decisiones de Cupertino. También es muy cierto que a la hora de hacer un buen trabajo lo importante es el trabajador y no la herramienta.

Que con una herramienta mejor se trabaja mejor, sí, vale, de acuerdo. Pero si el profesional  solo es capaz de hacer un trabajo digno con la herramienta más adecuada y potente… Mal vamos.

Que demasiado morro fino hay hoy en día, oiga. 


Cuando me llegue el Veintisiete veremos si me desdigo o no.



Jorge Díaz

viernes, 4 de diciembre de 2009

Desvergüenzas de cantamañanas mediocres.

Me pone enfermo del todo que unos cuantos sinvergüenzas mediocres, que no han aportado nada al arte, salvo el arte de la mercadotecnia aplicada a comerles el tarro a los que no tienen ningún tipo de criterio formado — y se cuidan muy mucho de que puedan llegar a formarlo por la cuenta que les trae —.

Mediocres imbéciles como Ramoncin — a ver si tienen cojones de cerrarme la bitácora como has hecho con el Jueves, so impresentable —, que solo pretenden vivir del cuento, embolsándose cánones por la compra de discos, ¡¡¡EN LOS CUALES GUADO MI PROPIEDAD INTELECTUAL!!!

Tenga la soberbia desvergüenza, siendo como son cuatro gatos afónicos, de intentar imponerle a todo dios el uso o desuso de la red, para su único beneficio.


Yo pirateo, pero aunque pirateara toda la mierda que estos individuos producen, — que ni bajo amenaza pirotécnica escucharía los gorgoritos de estos impresentables — durante años y años, no compensaría todos los cánones que he pagado en discos y productos informáticos que SOLO he usado para mi EXCLUSIVA propiedad intelectual.


Pero lo que más me indigna es que en el gobierno presten oídos a estos mafiosos de mierda, acompañados de 2.500 míseras y miserables firmas, pero no echen a lso 275.000 firmantes en contra de sus desmanes — y los que no hemos firmado que somos como varios millones, no te jode —.


Si esto mediocres que viven de la extorsión y el impuesto revolucionario a través de entidades mafiosas como la esgae o similares, tuvieran un mínimo talento, les importaría un carajo que se les pirateara porque siempre venderían mucho más.

Pero claro, si no cobran la extorsión tendrían que ponerse a trabajar y claro, un gilipollas como Ramoncin no encontraría curro ni de palanganero.


Bueno, yo comprare mierda en el top manta, — que tirare a la basura de inmediato, claro, tengo buen gusto —, solo por joderles, y animo a todos a hacer los mismo.


A continuación el manifiesto en contra de que nos la cuelen de rondón por la puta ley de sotenibilidad, que en este y otros casos, lo único que pretende sostener es el privilegio injusto de unos pocos sinvergüenzas a costa de el resto de la población.


P.D.: Hala, cerradme la bitácora y mañana la volveré a abrir en otro sitio, so gilipollas.


En defensa de los derechos fundamentales en Internet


Ante la inclusión en el Anteproyecto de Ley de Economía sostenible de modificaciones legislativas que afectan al libre ejercicio de las libertades de expresión, información y el derecho de acceso a la cultura a través de Internet, los periodistas, bloggers, usuarios, profesionales y creadores de internet manifestamos nuestra firme oposición al proyecto, y declaramos que:

1. Los derechos de autor no pueden situarse por encima de los derechos fundamentales de los ciudadanos, como el derecho a la privacidad, a la seguridad, a la presunción de inocencia, a la tutela judicial efectiva y a la libertad de expresión.

2. La suspensión de derechos fundamentales es y debe seguir siendo competencia exclusiva del poder judicial. Ni un cierre sin sentencia. Este anteproyecto, en contra de lo establecido en el artículo 20.5 de la Constitución, pone en manos de un órgano no judicial -un organismo dependiente del ministerio de Cultura-, la potestad de impedir a los ciudadanos españoles el acceso a cualquier página web.

3. La nueva legislación creará inseguridad jurídica en todo el sector tecnológico español, perjudicando uno de los pocos campos de desarrollo y futuro de nuestra economía, entorpeciendo la creación de empresas, introduciendo trabas a la libre competencia y ralentizando su proyección internacional.

4. La nueva legislación propuesta amenaza a los nuevos creadores y entorpece la creación cultural. Con Internet y los sucesivos avances tecnológicos se ha democratizado extraordinariamente la creación y emisión de contenidos de todo tipo, que ya no provienen prevalentemente de las industrias culturales tradicionales, sino de multitud de fuentes diferentes.

5. Los autores, como todos los trabajadores, tienen derecho a vivir de su trabajo con nuevas ideas creativas, modelos de negocio y actividades asociadas a sus creaciones. Intentar sostener con cambios legislativos a una industria obsoleta que no sabe adaptarse a este nuevo entorno no es ni justo ni realista. Si su modelo de negocio se basaba en el control de las copias de las obras y en Internet no es posible sin vulnerar derechos fundamentales, deberían buscar otro modelo.

6. Consideramos que las industrias culturales necesitan para sobrevivir alternativas modernas, eficaces, creíbles y asequibles y que se adecuen a los nuevos usos sociales, en lugar de limitaciones tan desproporcionadas como ineficaces para el fin que dicen perseguir.

7. Internet debe funcionar de forma libre y sin interferencias políticas auspiciadas por sectores que pretenden perpetuar obsoletos modelos de negocio e imposibilitar que el saber humano siga siendo libre.

8. Exigimos que el Gobierno garantice por ley la neutralidad de la Red, en España ante cualquier presión que pueda producirse, como marco para el desarrollo de una economía sostenible y realista de cara al futuro.

9. Proponemos una verdadera reforma del derecho de propiedad intelectual orientada a su fin: devolver a la sociedad el conocimiento, promover el dominio público y limitar los abusos de las entidades gestoras.

10. En democracia las leyes y sus modificaciones deben aprobarse tras el oportuno debate público y habiendo consultado previamente a todas las partes implicadas. No es de recibo que se realicen cambios legislativos que afectan a derechos fundamentales en una ley no orgánica y que versa sobre otra materia.

Este manifiesto, elaborado de forma conjunta por varios autores, es de todos y de ninguno. Se ha publicado en multitud de sitios web. Si estás de acuerdo y quieres sumarte a él, difúndelo por Internet.



Jorge Díaz

Gilipolleces dignas de la esgae.

A partir de ahora, en esta página y hasta que el cantamañanas de Mamoncin consiga cerrar esta bitácora por decir la verdad, esto es; son todos unos cantamañanas. Vamos a asimilar la palabra Gilipollez con Acto de la Esgae y sus insoportables miembros.


Quizás, digo yo, si en vez de andar persiguiendo supuestas piraterías y pretendiendo cobrar impuestos revolucionarios, se dedicaran a intentar hacer algo medianamente digno, existiría alguien dispuesto a pagar cuarenta euros por sus putos discos.

Pero claro, la gran mayoría de la gente, por ingenua que sea para pensar que después de los años a fin lo mismo aprende a cantar el Alejandrito, en vez de berrear como un gato afónico, por poner por caso, pero no son tan tontos como para comprar el disquito sin antes haberlo probado — y haberse horrorizado — antes descargándolo.

Claro que después de oírlo, si lo descargas lo borras y punto, pero el disco son cuarenta euracos.

Vamos, que ni el más tonto con el gusto justo a la almorrana y tímpanos de corcho pasa por caja por esas grandes obras, pasan por el top manta como mucho — que por cierto, las discográficas están detrás de muchos de estos top manta en plan caja B —.

Mira los Camelos, esos no sufren de piratería porque venden a pelo puta en gasolineras y áreas de servicio, pero claro, los esgae son mu importantes como para vender a tres euros — que ni así —.


Claro, lógicamente no les gusta la piratería porque así tienen más primos que piquen pasando por caja y no tienen que aprender a hacer algo… dejémoslo en digno.

Lo más curioso es que todos estos pretendidos artistas de la esgae son fracasadillos con mucho morro y pocas ventas y que venderían aún menos si no fuera por el dineral que se gastan en auto promoción.

¿Alguien en su sano juicio compra lo último del  Del Pozo?

Los auténticos artistas, los buenos, se las trae floja las descargas piratas porque aun a pesar de ellas venden y mucho.


Bueno, lo que decía, en está casa y como estoy hasta los cojones de pagar la extorsión de esta gentuza al compra un disco para guardar MI propiedad intelectual, pues eso, hasta que no me devuelvan los cientos de euros que me han extorsionado, definiré gilipollez como cosa de la esgae.


Y voy con dos ejemplos que me he encontrado por la red — y uso las fotos porque me sale de los cojones, que me cierren la bitácora si se atreven, que mis fotos me las han pirateado mucho y nadie me ha dado canon alguno para compensarme, que coño—.


La primera es el colmo del pijerío tecnológico digno de la esgae y Mamoncin o Rosarito — y el gato sigue haciendo uyuyuyuy cada vez que la oye —.


El aparato es un cacharrito que dispara un ultrasonido molesto para el oído de los cánidos cuando el el perrito se acerca al vater a beber de él y así asustarlo.


Bueno, vale, es un invento pero… ¿no es más fácil cerrar la tapa y punto?, porque vamos, hay que ser profundamente gilipollas para gastarse cerca de setenta euros en un cacharro espanta canes cuando lo más fácil y educado es bajar al tapa del vater.

Vamos, que cosa de Tedi Babosita.


Bueno, es una de esas cosas que son tópicas, aun me acuerdo de aquel episodio de cesei en el que descubrían que había pasado un hombre por la escena del crimen porque la tapa del vater estaba levantada y la víctima era mujer…

Otra de Locuquillo y su tupé porque por ejemplo, conocí a una mujer, mi difunta, que siempre, siempre, pero siempre dejaba la tapa levantada y siempre, pero siempre siempre, era yo el que la bajaba, siempre lo he hecho que así me educaron, para bajar la tapa del vater, cruzar por el paso de peatones y usar papeleras, así de raro soy.

Así que decir que los hombres siempre se dejan la tapa levantada y las mujeres siempre la bajan es una gilipollez digna de Alenjanfónico Sans.


Otra.


El hacerse tatuajes es una de las costumbres más estúpidas que se pueden tener, aún diría que es más tonto que fumar.

Me hincharé a reír cuando de aquí a unos años se hable del problema que sufren algunas mujeres que por ponerse tatuajes no pueden parir con la epidural.

Sus jodeis por gilipollas tatuadas, que coño.

O que hay muchas infecciones por tatuajes hechos sin salubridad, pues sus jodeis.


Peor será cuando los geriátricos se llenen de pieles tumefactas y arrugadas, llenas de rayones y colorines sin sentido.

Me lo imagino como un sarpei de cretona de sofá cutre.

Bueno, creo que los que se planteen la geriatría como profesión de futuro deberían replanteárselo no sea que acaben muriendo de síndrome de nausea continua.


Pero la mamarrachada digna de la esgae es tatuarse la cámara fotográfica preferida en el brazo.

Joder, ¿que pasa con el “amor de madre”, el “viva la patria”, el clásico símbolito céltico o carcelario de toda la vida?

¡Bah, ni hablar! va el primo y se tatúa la Cikon o la Nacon y así se manifiesta su amor por su cámara.

Joer, y yo que cuando me tire una década siendo fotero consideraba la cámara como una simple herramienta, que sí, que las tengo cariño y guardo la media docena que he usado en mi vida, pero tatuármela… ni que fuera artista de la esgae.


Lo dicho, o estos son de la esgae o yo soy muy rarito.


Hala, ya está dicho, y desafío a la pandilla de cantamañanas de la esgae a que me cierren la bitácora, que yo la abro mañana en otro sitio tan pancho y tan contento, a ver quien se cansa antes.


Jorge Díaz.

Yo pirateo por joderles y lo tiro a la basura.

Opiniones censurables… ¿a que no hay cojones?

Hay que ser un completo gilipollas para pensar que si no me dejan bajarme un disco por la red voy a ir corriendo a la tienda a comprarlo. Si realmente mereciera la pena lo compraría directamente.

miércoles, 18 de noviembre de 2009

Vocavulario MacLefico (Opus 4)


31- MacKrocosmos

Opuesto a MicKrocosmos.


32- Mickrocosmos.

1. Opuesto a MacKrocosmos.

2. MacKrocosmos con falta de ortografía, ¡a ver si te fijas al escribir, leñe!


33- MacKrocefalo

1. Cabezón: Mac Plus, 128, 512, Classic, Classic color, SE 30. etc.

2. Si, eso que estas pensado. 

3. No, no lo voy a decir.


34- MacKrobiotico

1. Sano y natural, que come equilibradamente y cuida su dieta.

2. Aburrido.

3. ¡Con lo saludable que es un buen chuletón de buey de kilo y medio, regado con Sangre de Toro!


35- MacChorra

1. Mackera hombruna y poco femenina.

2. Titola muy Mackera.

3. Mackero dado a decir o hacer tonterías y, claro esta, chorradas.

4. Yo, si, otra vez yo, siempre yo.


36- MacChota.

1. En mi pueblo, amoto de pequeña cilindrada, perteneciente a un mackero.

2. Lo que en mi pueblo dicen cuando le roban la amoto; “¡Macchota, macchota, que ma la roban!”

3. Sí. también es un chiste muy malo, lo se.


37- MacChuta

1. O MacChutar. Cabrearse con el Mac hasta el punto de darle una patada, actitud muy poco recomendable, a todas luces condenable.

2. Dícese de aquellos que usan el Mac para vicios estupefacíenticos, cosa rara, porque el Mac ya de por si alucina que te cagas.

3. Por muy fanático mackero que se sea, inyectarse en vena un Mac me parece un poco excesivo.


38- MacChuca

1. MacChacar.

2. Masticar el cable del ratón ante repetidos intentos fallidos de acceder a internet por los excelente servicios de Timofónica o similares. Si el ratón es inalámbrico se mastica el borde de la mesa


39- MacZizo

Yo.


40- MacTetilla

1. Atributo mamario de pequeño tamaño... ¿o que te creías?

2. Queso típico de Galicia, usado como tapa acompañado de una estrella, mientras se trabaja con el Mac.

Los Apple son más o menos buenos…

Me ha sorprendido… bueno, lo triste es que no me ha sorprendido nada de nada. Una noticia en la cual los portátiles de Apple se han clasificado en un puesto intermedio en fiabilidad con respecto a otros portátiles.


Bueno, — repito —, los que llevamos en el Mac desde los ochenta hemos visto centenares de comparativas sobre lo buenos o malos que son los Mac con respecto a los PC.


Durante años, los makero nos sonreíamos y pasábamos página sin pudor, era del todo evidente que tales estudios eran, cuando menos, interesados.

Lo más molesto del asunto era que siempre aparecía el tocapelotas de turno a comentarnos las gran noticia y nos obligaba a perder cinco o diez minutos demostrándole que era una noticia interesada y falseada.


Pero ahora… 


Tengo en activo un Ibook concha, un pismo, un G4 y un MBP.


Y… la triste verdad es que rendimientos a parte, el Ibook y el pismo son bastante más fiables con casi diez años en encima de sus circuitos que el MBP y el G4 queda en un puesto intermedio.


La triste verdad es que el MBP tiene a sus tres añitos bastantes más achaques que el pismo, y resulta más estable el G4.


Cuando salía uno de estos estudios en el dos mil, nos reíamos, “otro burdo intento pecero”, pero es que ahora es mejor quedarnos calladitos y mirar para otro lado.

La loca carrera minimalista y pijodiseñera de Jobs ha creado máquinas bellas, esbeltas y, porqué no, potentes. Sí.

Pero se ha dejado por el camino la fiabilidad y la pujanza tecnológica de la que presumíamos los makeros.

Sí, el Mac se vende más, pero no mejor.

Sí, el Mac es más popular al soportar ruindos, pero es que ya no hay tanta diferencia con él.

Sí, el Mac es más barato, pero a costa de no ser tan bueno.


Lo triste es que tanto sacrificio para que Apple sea muy rentable se ha dejado por el camino la identidad y las cualidades que hizo a Apple una marca mundial nacida de la nada.


Llevo tiempo denunciando que Apple ha pasado de ser el mejor ordenador personal, con el mejor Sistema Operativo, a ser solo de lo mejor.


Quizás el futuro soñado por Jobs este en la venta de politonos, en los contenidos ociosos por la red y en los gachet pijotecnológicos, sacrificando el “computer” del nombre de Apple.


Pero sinceramente, ¿hay alguien que crea que pasar de ser el mejor fabricante de ordenadores del mundo a ser uno de los mejores es saludable a largo plazo?


En fin, si hoy me viene un tocapelotas a comentarme al noticia, lo único bueno será que no perderé el tiempo, le daré la razón y punto.

Pero eso me dejara un gusto amargo en la boca.

Gracias otra vez, señor Jobs.



Jorge Díaz

lunes, 9 de noviembre de 2009

Vocavulario MacLefico.


21- MacChacon

Pesado, Gillermito Puertas. Estivito Jobs — por desgracia —.


22- MacKuco

Mac muy mono y pinturero.


23- MacKuca

MacKuco pero en sudamérica.


24- MacKrudo

1. Mac muy frío e invernal.

2. Mac inmaduro y por hacer.

3. Mac con muy mal rollo.


25- MacAhogo

Pos eso; ¡que no respiro!


26- MacKroporofila

1. Capelo de las Macfanerógamas.

2. ¿Queslocualomandeustedque?


27- MacFanerógamas

¡Ehhhh…!, Si, esto… y, bueno… ¿quien no lo sabe?


28- MacKao.

1. Efecto de perder el conocimiento en medio de un cruento enfrentamiento del tipo corrupción del PP.

2. Posesión portuguesa en la costa meridional de china… siempre y cuando usen Mac.


29- MacKaense

1. Mackero de MacKao.

2. Perteneciente o relativo a esta posesión portuguesa en la costa meridional de china… siempre y cuando usen Mac.

3. Lo que suele decir el criado negro en los safaris de escoceses: “¡Buana!, ¡Mac Kaense a suelo!

4. Si, lo se, es un chiste muy malo.


30- MacKromolecular

Dícese del mackero o mackera que posee una mole cular enorme y poderosa como la mole cular de una osa u oso.

Como soy pobre...

Como soy un pensionista pobre, no tengo más remedio que intentar buscarme la vida, rentabilizando mis cosillas.

Así que debéis saber que los artículos están disponibles en formato PDF con fotos en alta resolución a un módico precio y podéis comprarlos contra reembolso solicitándolos a través de <Atrabiliario.sat@gmail.com>.

Si os conformáis con lo que se ve en la página, bien, pero si compráis me ayudareis a seguir publicando más cosas.

Un pelín de solidaridad entre humildes no esta de más y todos nos beneficiamos, ¿no os parece?